Kourtney Kardashian ya es una mujer casada ante los ojos de la ley, por lo que no debería resultar demasiado sorprendente que se tome con mucha calma los preparativos de la espectacular ceremonia italiana que, junto a su marido Travis Barker y ciertos miembros de su familia, prepara a fin de poner broche de oro a su historia de amor.
De acuerdo con fuentes cercanas, la mayor de las tres hermanas Kardashian está "de muy buen humor" y para nada estresada de cara al gran evento. De hecho, Kourtney está muy ilusionada con pasar el resto de sus días con el baterista de la banda Blink-182 y en ello centra sus pensamientos.