A lo largo del tiempo que pasaron juntos, Kanye West se convirtió en el estilista de Kim Kardashian. Incluso en una ocasión voló por sorpresa a Francia para ayudarla a elegir sus looks durante la Semana de la Moda de París porque creía que ella sola no estaba haciendo un buen trabajo.
Irónicamente ahora los roles se han invertido y es Kim quien 'asesora' a su novio, Pete Davidson, sobre la ropa que debe ponerse.