La cantante Madonna ha demostrado que la mansión de Hidden Hills (California) que compró en abril del año pasado o no es de su gusto o fue adquirida como mera inversión inmobiliaria. La noticia alcanzó especial relevancia en esos momentos debido a que esa vivienda pertenecía hasta entonces al artista canadiense The Weekend, quien recibió unos 19 millones de dólares de la reina del pop para deshacerse del inmueble.
Madonna pone a la venta la casa que le compró a The Weeknd el año pasado, ¿por?
La reina del pop pide 26 millones de dólares por la vivienda.
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Pues bien, la intérprete decidió poner esa lujosa casa en el mercado y a un precio de 26 millones de dólares, según la información que apareció este viernes en el registro conocido como Multiple Listing Service. En ese mismo portal se detallan las impresionantes características de la propiedad, que cuenta con una extensión de más de 12.000 metros cuadrados, una casita de invitados y un granero reconvertido en gimnasio y sala de Pilates.
El edificio principal no se diferencia demasiado de un centro comercial, ya que dispone de una sala de cine, un estudio de grabación y un bar con terraza, entre otros muchas maravillas. Tiene además once dormitorios y el más grande de ellos, el que se presupone que utilizaba la diva de la música, si es que llegó a residir allí, incluye dos guardarropas, una enorme bañera de piedra maciza y una sauna. El exterior de la casa nada tiene que envidiar al interior, gracias a su piscina, su cancha de baloncesto y a un jacuzzi con capacidad para diez personas.
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Las habilidades negociadoras de Madonna y su equipo quedaron claramente patentes en el proceso de compraventa, ya que The Weeknd -cuyo verdadero nombre es Abel Tesfaye- pedía inicialmente 25 millones de dólares por la propiedad, por lo que la intérprete acabó ahorrándose cerca de seis millones.
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