Actor Jussie Smollett irá a la cárcel tras fingir ataque racista

El antiguo protagonista de la serie Empire tendrá que pagar más de 120.000 dólares a la ciudad por los recursos que se invirtieron en la investigación en torno al crimen del que aseguraba haber sido víctima y ha recibido una multa de 25.000 dólares.

Inicialmente el actor se negó a hablar antes de que se dictara sentencia por recomendación de su abogado, porque planea apelar, pero al escuchar la decisión del juez comenzó a gritar: "¡Soy inocente!". También insinuó que su vida correría peligro en prisión y que existía alguna especie de complot en su contra.

"No soy un suicida. Soy inocente y no soy un suicida. Si hubiese hecho esto, entonces significaría que jugué con los miedos que han padecido los americanos negros en este país durante más de 400 años y con los miedos de la comunidad LGBTQ", añadió. "Su señoría, le respeto y respeto su decisión, pero yo no he hecho nada y no soy un suicida. Si me pasa algo cuando entre ahí, no me lo habré hecho yo, y deben saberlo".

Sus palabras no consiguieron conmover al juez, que le tachó de "arrogante, egoísta y narcisista" y añadió que el intérprete había cometido horas y horas de perjurio en el estrado.

De esta forma se ha cerrado una larga y ardua batalla legal en la que Smollett ha defendido en todo momento su inocencia, aunque sí admitió haber mantenido una relación con uno de los dos hermanos, Abimbola 'Bola' y Olabinjo 'Ola' Osundairo, a los que aparentemente pagó para organizar un ataque con el que ganarse el favor de la opinión pública y conseguir un aumento de sueldo en la serie en la que estaba trabajando.