Eminem protagonizó una de los momentos más polémicos en el Super Bowl, cuando al final de su presentación se arrodilló en el escenario evocando a la protesta del ex jugador Colin Kaepernick, quien en 2016 popularizó el gesto durante el himno nacional para manifestarse por la violencia policial, en contra de las comunidades afroamericanas en Estados Unidos.
Pero algo que también llamó la atención fue que Marshall Bruce Mathers III, nombre real del cantante, estuvo acompañado de su hija Hailie Mathers, quien le mostró su apoyo en el estadio Sofi y disfrutó del show que ofreció frente a más de 70 mil personas.