Jada Pinkett Smith y Will Smith.(Tinseltown/Shutterstock / Tinseltown.)
Agencia México
En 2011 Will Smith pasó por una situación muy complicada después de preparar una fiesta espectacular para el cumpleaños número 40 de su esposa Jada Pinkett Smith, pues al final ella lo rechazó de una manera muy dolorosa e inesperada.
El actor confesó que se sentía como “el marido perfecto” al planear una gran celebración de tres días que incluyó golf, caminatas, una cena masiva y un paseo hasta un arco lleno de fotos de su esposa, pero Jada tenía una vibra tan diferente, lo que hizo que cancelara el resto del festejo después de la primera noche, pues la actriz calificó todo el asunto como “la demostración de ego más repugnante que he visto en mi vida”.
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Will manifestó en su nuevo libro de memorias que, ante esta declaración, Pinkett Smith no volvió a comentar nada y de hecho continúo con ese silencio durante el resto del viaje, el vuelo a casa y durante los siguientes días, por lo que el también productor le expresó: “Me retiro. Me retiro de tratar de hacerte feliz ... renuncio. Tú vas a hacer tu vida, y yo voy a ir por la mía”. Y eso es lo que hicieron.
Will Smith se sintió tan ofendido con el comentario de su esposa que buscó alivio con una terapeuta y sustancias.(Jaguar PS/Shutterstock / Jaguar PS.)
Debido al dolor que le provocó esta situación, el actor trató de buscar respuestas y ayuda a través de psicofármacos e incluso con un experto en sexo tántrico a quien reveló que lo que realmente lo haría feliz es un harem.
Will Smith cuenta que probó con la ayahuasca y un té psicotrópico en 14 momentos diferentes, y que durante ocho de esas experiencias extracorporales tuvo un encuentro con una entidad a la que llamó “madre”, a la que describió como una “mujer invisible” detrás de él.
A Jada no le gustó el festejo que le organizó su esposo por sus 40 años.(s_bukley/Shutterstock / s_bukley.)
También dijo que tuvo una revelación mientras estaba allí: “Si soy así de hermoso, no necesito las películas número uno para sentirme bien conmigo mismo. Si soy así de hermoso, no necesito récords de éxitos para sentirme digno de ser amado. Si soy así de hermoso, no necesito que Jada ni nadie más me valide”.
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Durante su exploración de la iluminación sobre sí mismo y su camino hacia la felicidad, consultó con la experta en sexualidad tántrica Michaela Boehm, quien inmediatamente le preguntó qué lo haría feliz.
Will Smith y Jada Pinkett Smith se separaron luego del cumpleaños 40 de la actriz, pero luego retomaron su matrimonio.(Jaguar PS/Shutterstock / Jaguar PS.)
“Tendría un harén”, le respondió, a lo que ella le replicó: “Mire, usted es Will ‘Effin’ Smith. Es una de las personas más ricas y queridas del mundo. Si no puedes tener la vida que deseas, el resto de nosotros estamos jodidos”.
Acto seguido, el artista comenzó a nombrar a algunas de las mujeres de ensueño con las que tendría una relación, incluidas Misty Copeland y Halle Berry. Pero Boehm lo empujó a ir más allá, e incluso le mostró videos de varias mujeres influyentes de todo el mundo para ayudarlo a aumentar la población de su harén a 25 mujeres (Smith no las nombra a todas en su libro).
Cabe señalar que todo esto sucedió durante una de las veces que se ha separado de Jada, ya que finalmente se reconciliaron, pero han sugerido en algunas entrevistas que disfrutan de una iteración diferente de su matrimonio, que podría ya no ser exclusivamente monógamo.
