Lo sucedido en el set de la cinta Rust que involucra al actor Alec Baldwin sigue arrojando datos desgarradores. La investigación sigue su curso en Santa Fe, Nuevo México y poco a poco se han dado a conocer detalles del trágico accidente que terminó con la vida de Halyna Hutchins, directora de fotografía, y que también, hirió al director de la película, Joel Souza.
Las últimas palabras de Halyna Hutchins antes de morir
La directora de fotografía, según testigos, no perdió el sentido del humor en sus últimos momentos de vida tras el accidente que involucra al actor Alec Baldwin.
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Alec ha permanecido en constante contacto con la policía. Así lo informó el fin de semana, al enfrentar a la prensa que lo siguió hasta Vermont, donde pasa unos días de descanso con Hilaria Baldwin, su esposa, y sus seis hijos. El actor, de 63 años, fue claro al mencionar su colaboración con la policía y recalcar que Halyna era su amiga.
Directora muere por accidente en filmación de película; Alec Baldwin disparó
Todos los medios de comunicación insisten en recabar datos que puedan descifrar el trágico incidente e incluso, señalar en dónde o de quién fue el error garrafal de poner a disposición del filme, balas reales. Pero los últimos datos sobre esta terrible experiencia se enfocaron en los últimos instantes de vida de Hutchins.
Según el L.A. Times, Halyna habría conservado su buen humor con su equipo tras recibir el impacto de bala que golpeó su pecho. “Eso no estuvo bien, eso no estuvo bien del todo”, habrían sido la frase que repitió frente a su equipo de producción que se acercó a auxiliarla antes de que llegara la ambulancia. Los primeros informes aseguran que Hutchins se tambaleo hacia atrás y cayó en los brazos de Souza, también herido.
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Más allá de estar heridos, tanto Joel como Halyna estaban desconcertados por lo sucedido. “¿Qué mie** fue eso? ¡Eso quema!”, habría sido el grito del director de la cinta al sentir el disparo. Testigos afirman que también Baldwin gritó desesperado: “¿Qué mie*** acaba de pasar?”, al escuchar la detonación.
Como ya se ha hecho público, el actor estaba practicando una escena dentro de una iglesia montada en el set. Alec portaba una Colt revolver calibre 45 que se trataba de un arma ‘fría’, palabras utilizadas en el argot cinematográfico que aseguran que la pistola no tiene balas reales.
Cuando Baldwin se movió coreográficamente para mostrarle al director cómo lo haría en la escena, la tragedia sucedió. “Supongo que voy a sacar esto, quitarlo y… ¡Bang!”, comentó el actor mientras realizaba un movimiento hacia la cámara y disparó pensando en que el arma traería balas de salva.
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La policía halló en el set bolsas y cajas llenas de munición diversa, eso según el documento presentado en el Tribunal de Primera Instancia del Condado de Santa Fe. Los agentes incautaron 12 revólveres y un rifle, sin dar más detalles del tipo de armas que eran. En el expediente del caso sobresale el nombre de la jefa de armas, Hannah Gutiérrez-Reed, sobre quien pesa el foco de la investigación por ser la encargada de ‘cuidar’ y ‘proveer’ las armas a los actores.
En su primera declaración, Hannah comentó que las armas permanecían aseguradas ‘dentro de una caja fuerte en un camión de utilería en el set’ y que pocas personas tenían acceso a ésta. Sin embargo, en la lista de artículos incautados no existe récord de una caja fuerte.
Todavía no hay fecha final para el cierre de la investigación de este trágico accidente que podría cambiar el rumbo de las filmaciones con armas en Hollywood. Alec Baldwin se manifestó respecto al tema pidiendo un replanteamiento en el futuro por parte de las producciones cinematográficas. “Cuántas balas fueron disparadas en shows de TV y cine en los últimos cinco, siete años. Casi todas sin incidentes. Entonces, lo que ahora debe suceder es que, cuando algo sí sale mal como en este horrible y catastrófico episodio, hay que tomar medidas. Armas de utilería o de plástico”, advirtió frente a los reporteros.
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