Este sábado Kate Hudson se convirtió en el centro de todas las miradas durante uno de los eventos celebrados en el Festival de Cine de Venecia gracias a un vestido negro de Mônot, que mostraba de más.
El diseño incluía un escote pronunciado, cortes a la altura del abdomen y unas aberturas de vértigo en la falda, y dependiendo del ángulo, no resulta apto para todos los públicos.
La intérprete era muy consciente de que su look daría mucho que hablar por lo revelador que resultaba antes incluso de pisar la alfombra roja, y no dudó en bromear al respecto compartiendo una fotografía en Instagram junto a la famosa cita de Coco Chanel "antes de salir de casa, mírate al espejo y quítate un complemento", para añadir: "Yo decidí quitar tela".
Sus seguidores no tardaron en aplaudirla por su audacia y por su impresionante físico, pero hubo dos personas que preferirían no haber visto la instantánea en cuestión: su hermano Oliver Hudson y su hijo Ryder.
"Esto no me gusta en absoluto", le ha aseguró el primero en la sección de comentarios, donde el hijo mayor de Kate también dio su opinión al respecto. "Coco Chanel no tenía tres hijos, mamá", le recordó el joven de 17 años, fruto de su matrimonio con el músico Chris Robinson.
