Muchas antiguas estrellas infantiles han mordido la mano que les alimentó durante años tras librarse de los contratos que les ataban a los estudios Disney.
Bella Thorne y Miley Cyrus abrazaron por completo la estética provocadora que se les prohibió utilizar mientras trabajaban para la factoría e incluso los siempre precavidos Jonas Brothers reconocieron que les resultó muy duro seguir fingiendo que eran unos adolescentes, con todo lo que ello conllevaba, cuando se habían convertido ya en tres hombres adultos.