Las hermanas Khloé y Kourtney Kardashian solo aceptaron formar parte del elenco de ese entonces proyecto de programa de telerrealidad llamado 'Keeping Up With The Kardashians', que terminó convirtiéndose en uno de los fenómenos mediáticos y culturales más significativos de las últimas décadas.
Khloé y Kourtney fueron 'engañadas' para participar en el reality familiar
Todo ocurrió después de que su madre Kris Jenner, el cerebro detrás de semejante iniciativa, les prometiera que sus apariciones en el 'show' serían esporádicas y meramente dirigidas a complementar a la protagonista absoluta del espacio, Kim Kardashian.
Tanto es así, que las también empresarias pusieron como condición que todas las escenas que se grabaran de ellas tuvieran lugar en las boutiques de su ya desaparecida cadena de tiendas de ropa DASH, de forma que pudieran aprovechar su presencia en el 'reality', inicialmente testimonial, para promocionar sus artículos y dar a conocer la firma ante un público más generalista.
"Kourt y yo dijimos: 'Queremos grabar en nuestras tiendas'. Y creo que nuestra madre nos engañó un poco. Al principio nos dijo que sí, que solo grabaríamos en las tiendas y que era lo único a lo que nos comprometía. Y la verdad es que así fue en un principio, pero luego las cosas empezaron a evolucionar por sí solas.
Al final dijimos: 'Bueno, ya que estamos aquí...'. Al final todo se convirtió en una bola de nieve que no paraba de crecer, pero es cierto que al principio ninguno de nosotros sabíamos muy bien dónde nos metíamos”.
Dijo en conversación con el podcast de sus amigas Malika y Khadijah Haqq, quienes entonces trabajaban con las hermanas Kardashian en DASH.