Jada Pinkett Smith sigue haciendo sorprendentes confesiones sobre su vida personal en el marco de su exitoso programa de Facebook 'Red Table Talk', revelaciones muy ligadas a sus tiempos más difíciles y problemáticos.
Jada Pinkett Smith se sincera como nunca sobre sus adicciones en la adolescencia
En esta ocasión, la también esposa de Will Smith ha reunido tanto a su madre Adrienne como a su hija Willow para reflexionar junto a ellas sobre el consumo excesivo de alcohol que solía presentar en plena adolescencia y que tuvo continuidad en sus primeros años de juventud.
La artista reveló que empezó a beber vodka y otros fuertes licores a los 15 años, en grandes cantidades y de forma compulsiva, de lo que sin duda se desprendía un problema de adicción acentuado además por el momento de insatisfacción y angustia vital que la atenazaba en esos tiempos.
Por si eso no fuera suficiente, una vez terminada su etapa en el instituto, Jada acabó incorporando a su día a día otras sustancias tales como el éxtasis y la marihuana.
Durante su emotiva conversación con su progenitora y su hija pequeña, la ahora estrella televisiva no ha dudado en vincular tan destructiva dinámica a los problemas que arrastraba en el marco de la salud mental, aunque afortunadamente la intérprete ha podido superar tales contratiempos y ahora se limita a tomarse una copa de vino ocasionalmente y siempre desde una posición de tranquilidad.
"Tuve que tener cuidado, porque aunque dicen que el vino tinto es bueno para la salud, para mí era como agua. Estaba tan acostumbrada a beber cosas fuertes...", dijo.