Toño Mauri comparte que vivió encuentro espiritual mientras estuvo hospitalizado

Sin embargo, de acuerdo a las palabras del actor, tuvo un ‘empujón’ espiritual que lo ayudó a salir adelante en uno de los peores momentos. Y es que en entrevista con el programa Ventaneando, Mauri relató que tuvo una experiencia espiritual que hasta la fecha no ha podido explicarse.

Toño Mauri relató que cuando los doctores no daban un buen pronóstico en su evolución, su esposa, Carla Alemán, buscó un sacerdote para que le dieran los santos óleos, una tradición católica que consiste en untar aceite preparado en iglesias para pedir por la recuperación o el perdón de los pecados de la persona que lo requiera.

“Mi esposa Carla buscó un sacerdote para que me diera los santos óleos, y todo lo que pasó alrededor del sacerdote fue algo muy interesante, porque el sacerdote se comunicó con mi esposa, pero la llamada en donde entró decía teléfono desconocido, no venía el número.”, explicó.

El actor explicó que la comunicación del sacerdote con su esposa podía parecer misteriosa, pero en ese momento de tristeza y angustia fueron aspectos que ella no tomó en cuenta, sino hasta ahora que recuerdan lo ocurrido.

“Entonces el sacerdote le dijo que ya iba en camino al hospital, mi esposa habló al hospital para que dejaran entrar al sacerdote y le dijeron que era imposible porque a esa hora ya no había nadie que pudiera tener los accesos para nadie, que tratara al día siguiente…”, recordó.

No obstante, esa misma noche el sacerdote volvió a comunicarse con Carla para explicarle que ya había realizado la visita a Toño y que estuviera tranquila. Ante ello, la esposa de Mauri se comunicó al hospital para reportar que alguien había estado con su marido, sin embargo, las autoridades del hospital le dijeron que no había reportes de que nadie hubiera entrado a la habitación en la que él se encontraba.

“Esa misma noche, el sacerdote la volvió a contactar y le dijo que ya había estado conmigo, le dijo en dónde estaba, cómo estaba y le dijo que no se preocupara, que él ya me había puesto el aceite, ya me había ungido y que podía estar ella tranquila en ese aspecto. No sabemos qué pasó, porque el sacerdote le dijo, cuando iba camino a verme, mi esposa le dijo en qué parte estaba yo, y el sacerdote le dijo: ‘Ese lugar me lo tengo muy bien conocido’…”.

Más adelante, Toñó compartió que le han contado sobre el arcángel Rafael, encargado de velar por la recuperación de las personas enfermas y cuyo lema distintivo es justo, ‘Ese lugar me lo tengo muy bien conocido’…”, palabras que dice cuando hace alguna ‘aparición’ para ayudar a quien lo necesite.