Varios de los famosos presentados en la temporada 2 de Luis Miguel, la serie han declarado que la serie tiene imprecisiones.
Un ejemplo de ello es la supuesta relación de la abuela de Luis Miguel con la periodista Claudia de Icaza. Según se presenta en la serie, la abuela Matilde vendió a la periodista información privada sobre Marcela Basteri y los hermanos Gallego Basteri al personaje de Cynthia Casas (Claudia de Icaza) a fines en los años 90.
Según la ficción, el encuentro de Cynthia y Matilde sucedió meses después de la muerte de Hugo López, el manager de Micky, ocurrida en 1993, pero la serie es imprecisa en cuanto a fechas y versiones.
En la vida real, la abuela murió justo en 1994 y no está confirmado que haya viajado a México para intentar quedarse con la custodia de su nieto Sergio.
En realidad, Claudia de Icaza publicó una biografía no autorizada de Luis Miguel, El gran solitario, no un reportaje sobre el cantante que se dio a conocer en un diario capitalino. Al respecto, Claudia de Icaza negó a Quién haber conocido a la abuela de Luis Miguel.
Con respecto a Michelle Salas y Luis Miguel, no está confirmado que haya tenido una relación tan cercana con él durante su infancia. El doctor Octavio Foncerrada, allegado a Luis Miguel y su familia, aseguró que Micky “se llevaba a la niña a la casa luego de que Sylvia Pasquel autorizara a su hija”. También hay reportes de que durante los años 90 ella lo llamó en varias ocasiones buscando hablar con él.
Stephanie Salas, mamá de Michelle, tiene una versión distinta a la que se presenta en la serie. De hecho, hace unas semanas dio a entender que lo que mostraba la serie con respecto a su hija y Luis Miguel es falso.
La cantante y actriz publicó una serie de fotos de estudio con una indirecta para El Sol: "Mejor cuéntame uno de Pinocho ó Meglio raccontarmi una storia su Pinocchio".
La serie plantea que Luis Miguel empezó a tener problemas de audición a raíz un accidente detonado por la mala calidad del equipo de sonido que se contrató para una presentación en Perú en el año 2005. El libro biográfico Oro de rey narra que Luis Miguel tuvo un incidente de audio "que lo dejó casi sordo" durante un concierto en Perú, aunque no se especifica ni en qué evento ni en qué año ocurrió.
Al respecto, el empresario peruano Jorge Fernández declaró al suplemento “Saltar Intro” del periódico El Comercio que Micky sí tuvo un incidente de este tipo, pero en 1993, cuando aún vivía Hugo López, y que éste no ocurrió en un recinto, sino en un restaurante llamado Muelle Uno.
Otra versión a punta a un incidente ocurrido en 2014 durante una presentación en Argentina. En un video que circuló en redes sociales, se observa el momento en el que Luis Miguel deja de cantar por varios minutos y camina en el escenario tocándose el oído tras un aparente error técnico en el audio.
El romance con Erika (Issabela Camil) sí fue largo y también está documentado que ella lo acompañó en varios viajes y pasaban largas temporadas en Acapulco, pero no hay evidencia de que vivieran juntos.
En el último capítulo de la serie resultó sorprendente que Micky tuviera la intención de proponerle matrimonio a Issabela, hecho que es de dudarse, pues según sus biógrafos, a Luis Miguel nunca le ha interesado la vida de casado.
Según la serie, Luis Miguel negó a su hija Michelle durante una entrevista con una periodista. En la vida real no la negó una, sino dos veces: en Mala noche no con Verónica Castro y en Siempre en domingo, conducido por el icónico Raúl Velasco.
Según la serie, una cantante famosa llamada Paola Montero, a quien Alex, hermano de Micky, la llama la chava “Every Body Loves Banana”, se convierte en uno de los intereses amorosos de Luis Miguel.
Por la descripción y el vestuario, se asumió que se trataba de Paty Manterola, integrante del grupo Garibaldi. Posteriormente, la cantante y conductora se molestó y negó la versión que se presenta en la historia.
“Saben que siempre he sido una mujer alejada de los escándalos, respetuosa y transparente, así que para los que me han preguntado, la serie de Luis Miguel hace alusión a una mujer que cantaba ‘Everybody loves banana’ y utilizaba un vestuario idéntico a uno que utilicé en el grupo. Al igual que muchos, automáticamente pensé en Garibaldi. Categóricamente les digo que sí están haciendo cualquier alusión a mi persona, difiere completamente de la calidad de mujer que siempre he sido y con la historia privada que viví en esos años”, dijo en una publicación de Instagram.
