Justo cuando se cumplen nada menos que diez años de una de las bodas más mediáticas y emocionantes del Reino Unido, la que protagonizaron los ahora duques de Cambridge, el príncipe William y Kate Middleton, en la abadía de Westminster en el año 2011, la prensa británica ha sacado a relucir una historia muy llamativa y enternecedora sobre la complicidad existente, al menos en esa época, entre el futuro heredero al trono y su hermano menor, Harry de Inglaterra.
El gran acto de amor de Harry a William que pasó a la historia
Según un documental emitido precisamente un día antes de la celebración de tan señalado aniversario, el menor de los hijos del príncipe Carlos no dudó en ceder a su hermano mayor una de las piezas con mayor valor económico y sentimental del joyero de su fallecida madre, Lady Di.
Se trata del anillo que esta recibió cuando su luego exmarido le pidió matrimonio en la década de los ochenta. El propósito de esa cesión, como no podía ser de otra forma, pasaba por que William recreara tan bonito momento del pasado y diera así los pasos necesarios para asegurar su compromiso con la ahora duquesa Kate.
El que fuera mayordomo personal de Diana de Gales, Paul Burrell, ha sido el encargado de dar a conocer tan entrañable noticia. En sus declaraciones, el antiguo trabajador de palacio explicó que, en la citada selección de joyas que llevaron a cabo los dos hermanos, el precioso anillo de zafiros de Diana acabó en un primer momento en manos de Harry, quien posteriormente se lo dio a William para que le pidiera a Kate que se casara con él.