La mamá de Issabela Camil, Tony Starr, no está de acuerdo con el segundo episodio de Luis Miguel, la serie: así no se dio la ruptura de Luis Miguel y su hija, quienes fueron pareja de 1989 a 1995.
Según la ficción, luego de varios años de noviazgo [seis en la vida real], ella se hartó de que Micky no la incluyera en su vida y que de alguna forma no la dejara apoyarlo en los momentos difíciles, como cuando él descubrió lo que realmente le había pasado a su mamá.
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Él estaba tan concentrado en descubrir su paradero que descuidó por completo la relación. En la serie incluso vimos que ella, decepcionada, se va a Nueva York con una amiga, sin embargo, Tony Starr tiene otra versión:
Javier León Herrera y Juan Manuel Navarro nos hablan de su nuevo libro sobre Luis Miguel
“Él era cantante famoso, tenía otra perspectiva de la vida; ella tenía sus proyectos. La vida de él era muy pesada: cantar, vivir de noche, las fiestas, una vida muy diferente a la de Erika, ella nunca quería estar en esos momentos de gente y prensa y entonces empezaron a tener un distanciamiento”, aseguró la mamá de Erika Sotres [su nombre verdadero] al programa Ventaneando.
“Ninguno quería casarse, pero el puro ambiente de él, no era el ambiente que Erika quería vivir y él empezó a hacer lo que sea, ella empezó a retirarse y eventualmente se rompieron, pero eran jovencísimos los dos”, agregó Tony Starr.
Por último, la ex suegra de Luis Miguel se atrevió a asegurar que el gran amor del cantante es Issabela. “Y el amor de la vida de Micky sin duda es Issabela, que para mí se llama Erika, pero sin duda [lo es]”, dijo la viuda de Jaime Camil papá.
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Quién platicó con Javier León Herrera y Juan Manuel Navarro, autores de varios libros sobre Luis Miguel y ellos coinciden que Erika es uno de sus grandes amores, pero no el único.
Sobre la modelo y cantante, los autores dicen en su libro, Oro de rey: “Erika era una buena mujer, alguien que siempre había estado ahí, ese tipo de relaciones que avanzan desde el cariño de la amistad de muchos años; se conocían desde niños, cuando él apenas empezaba a forjar su carrera.
“Conforme fue creciendo, él empezó a estar más ausente de México y para cuando se reencontraron la admiración mutua empezó a convertirse en un amor cocido a fuego lento, cocinado en un entorno idílico como el puerto de Acapulco”.
Según los autores, en 1989 Erika y LuisMi se comportaban como una pareja de novios, aunque él la negaba en público. “Erika era una mujer discreta, con mucha clase. Lo acompañaba a Los Ángeles… permanecía a su lado pero siempre fuera de los focos y en un segundo plano, de bajo perfil. La gente del entorno del cantante la quería mucho… y les dolió cuando acabaron".
“[…] Todavía sostienen que fue la gran oportunidad que perdió de formar una gran familia con una buena mujer, que lo quería aun sabiendo que ya era padre de una hija… Luis Miguel se vio superado por el personaje y por el entorno. Erika empezó a sospechar con mucho fundamento que, a pesar de sus nobles intensiones, iba a ser muy difícil consolidar una relación seria con un Luis Miguel que se encontraba en una época de plenitud y que por otro lado, se dejaba arrastrar por los amigos, los encuentros, las parrandas, su admiración por la belleza femenina y las hormonas que alimentaban su vocación de conquistador”.