Maki Moguilevsky y Juan Soler dieron a conocer su ruptura en noviembre de 2018. Después de ese tiempo la actriz argentina sigue en el proceso de adaptarse a su nueva realidad y a su soltería.
Y a pesar de que no son pareja, la actriz argentina continúa en contacto con su pareja de 17 años y dice, no es tanto por las dos hijas que tienen en común, Azul y Mía, sino por otro inesperado motivo.
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“Seguimos estando juntos en cierta manera por las niñas. Todo le consulto; es mi amigo, es mi hermano, mi familia.
Pero no es por las niñas que yo tenga una relación con él; yo tengo una relación con él porque me cae bien. Creo que las niñas van a hacer su vida, pero siempre voy a sentir que soy familiar de él o que si él me necesita ahí voy a estar”, aseguró durante una entrevista con el programa Montse y Joe.
La actriz de telenovelas como El juego de la vida reconoció que aunque en un principio le temía a la soledad, en realidad la soltería le ha caído muy bien. “Ha sido una etapa muy buena para mí; le tenía miedo [a] la separación, estar solos y en pandemia después de 17 años. Me preguntan: ‘¿Cómo vives tu soltería?’. La verdad es que es diferente a los 20, cuando salíamos y reventábamos, que a los 40 y con las redes sociales”.
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Luego de confesar que no le gustaría tener como pareja a un hombre que pertenezca al medio artístico, pues quiere “nutrirme de otras cosas”, Maki Moguilevsky volvió a tocar el tema de su motivo de la ruptura con Juan. La argentina aclaró de una vez por todas que de pronto ella cambió y ya no estaba a gusto en la relación.
“Fue de a poquito. Fueron pasando muchas cosas que van desgastando la pareja. A veces la gente cambia. A mí me pasó que yo cambié; Juan estaba igual y yo de repente dije: ‘No, esto ya no, ya no me está acomodando, ya no estoy feliz’.
Me podría haber quedado en esa situación pero es mi vida. Y dije quiero probar y si veo que no funciona, regresaremos. Tampoco era de que él me hizo algo o yo le hice algo a él, te odio y no quiero volverte a ver; simplemente mis sentimientos cambiaron. Y él también, empezó a decir: no quiero a esta mujer para mi vida”.