Para sorpresa del mundo del entretenimiento, Jessica Alba desapareció casi por completo de la pequeña y de la gran pantalla en la recta final de sus veintitantos, convertida ya en una estrella gracias al éxito comercial de la serie 'Dark Angel' y de las películas de 'Los cuatro fantásticos', después de dar la bienvenida a su primera hija Honor, que ya ha cumplido ocho años.
"Mi motivación dejó de ser la idea de si alguien me contrataría de nuevo. Sinceramente, estaba en el punto álgido de su carrera. No podía volver a dedicarme a lo que hacía antes y seguir siendo auténtica. No era capaz. Ya no me importaba igual que antes", recordó la actriz en una entrevista a la revista Romper.