A diferencia de lo que se había rumorado hasta ahora, el acuerdo definitivo al que llegaron recientemente Adele y su exmarido Simon Konecki para disolver legalmente su matrimonio -fruto de varios años de duras negociaciones- descarta la obligación de que los antiguos cónyuges tengan que abonar una pensión de manutención u otro tipo de compensación económica el uno al otro.
Adele no tendrá que pagar pensión de manutención a su ex, tras divorcio
Por lo que parece que, desde que retomaran las conversaciones el pasado mes de enero, el debate principal a cuenta de su patrimonio compartido ha ido ligado al reparto equitativo de sus bienes.
Según los documentos legales a los que ha tenido acceso la revista Us Weekly, la estrella de la música y el empresario, quienes tienen al pequeño Angelo (8), también han sentado ya las bases de la custodia compartida del menor, una dinámica de especial importancia en la futura vida de la expareja como padres divorciados.
Las dos partes ya dejaron claro en el breve comunicado que, años atrás, emitieron para confirmar su separación que la prioridad absoluta de todo el proceso pasaba por proteger a toda costa el bienestar de su hijo.
Fuentes del entorno de la intérprete señalan ahora que la decisión, certificada por ambos, de renunciar a cualquier tipo de exigencia económica a la otra parte es resultado directo de la intervención de sendos mediadores en el último cara a cara que tuvo la expareja a principios de este año.
Asimismo, tales informantes han achacado la larga duración del caso, al menos en lo fundamental, a la complejidad derivada de tener que redistribuir su ingente patrimonio evitando cualquier tipo de agravio comparativo.