Aunque Kim Kardashian y Kanye West llevan separados varios meses, el hecho de que la empresaria interpusiera la demanda formal de divorcio este viernes 19 de febrero la afectó a nivel emocional.
Una fuente contó a la revista People que la socialité se está tomando el tiempo de digerir que su separación ahora sí es definitiva.
"Aunque Kim y Kanye han estado separados durante meses, le afectó solicitar el divorcio. Pasó el fin de semana cuidando de sí misma y de sus hijos. Está pasando tiempo con su mamá, sus hermanas y no ha estado trabajando. Todos la apoyan. Kim se siente muy afortunada de estar rodeada de su gran familia”, dijo una fuente a la publicación.
La fuente también reveló a People otro motivo de su divorcio: que ella se sentía decepcionada de que Kanye no se haya esforzado lo para salvar su matrimonio.
"No hay drama entre Kim y Kanye. Kim está sobretodo decepcionada de que no hayan podido averiguar cómo permanecer casados, pero se necesitan dos personas para crear un matrimonio feliz. Kim sintió que Kanye no estaba dispuesto a hacer el trabajo duro y comprometerse”, añadió la fuente.
Desde enero de este año empezó a correr el rumor de que Kim Kardashian estaba buscando contratar a Laura Wasser, la abogada experta en divorcios más famosa de Los Ángeles. Y eso porque para entonces Kim ya sabía que su matrimonio no funcionaba como ella esperaba.
"Simplemente no están en la misma página cuando se trata de su futuro como familia y Kim está de acuerdo con eso”, había dicho una fuente entonces a la revista.
En cuanto al músico, una fuente cercana a él asegura que está muy triste aunque resignado ante la decisión de su todavía esposa de ponerle fin a sus casi siete años de casados. "Sabía que (el divorcio) venía, pero eso no lo hace más fácil. Este es un día sombrío para él. Kanye está viendo a consejeros y asesores para que lo ayuden a superar este punto. Es difícil para él y no está feliz, pero está resignado a la realidad”, dijo el informante.
