La casa de Naya Rivera , quien perdió la vida de forma trágica en julio pasado a los 33 años, al ahogarse en el lago Piru, ubicado en el condado de Ventura, en Los Ángeles, California, fue rápidamente vendida, a pocos días de haber sido anunciada.
El inmueble recién renovado de cuatro dormitorios y tres baños salió a la venta el 6 de enero, seis meses después de la prematura muerte de la actriz de 'Glee'.
La propiedad cuenta con una extensión de dos mil 762 pies cuadrados y ha sido etiquetada como 'Smart Home', ya que tiene un sistema de sonido Sonos e incluye una cocina abierta de diseñador, arquitectura clásica francesa en la sala de estar y una piscina recién instalada.
La casa de dos niveles también tiene un baño principal tipo granja, una terraza de gran tamaño junto al 'master bedroom' y una cómoda sala de lavandería.
La residencia es de nueva construcción, con pisos de madera de roble blanco natural en todas partes. Rivera acababa de comprar la casa en 2018, luego de divorciarse de su ex marido Ryan Dorsey.
Tras el final de 'Glee', en 2015, Rivera pasó a ser la presentadora invitada de 'The View' y apareció en varios programas de televisión. Su última participación fue como juez en el reality de panadería de Netflix, 'Sugar Rush'.
El ex esposo de Naya, Ryan Dorsey, busca una reparación del daño que su hijo ha sufrido a partir del momento en que perdió a su mamá.
Según ha trascendido, en el documento legal se especifica que el niño ha experimentado daños económicos y no económicos debido a la muerte de la actriz. Se detalla que Josey vivió una "grave angustia emocional" como consecuencia de estar en el lugar donde su madre se ahogó.
De acuerdo con la prensa estadounidense, la demanda de Dorsey también específica que busca un juicio con jurado para la resolución del caso.
