En Acapulco una residencia llamaba la atención por ser el sitio en el que uno de los cantantes más reservados se refugiaba; en los años en los que Luis Miguel la adquirió, la Zona Diamante era exclusiva, alejada y muy privada; ahora como sitio fundamental de la reinvención del puerto ese escondite está abandonado y poco se sabía de cómo se ve en el interior.
Pero ahora, gracias a tres Tiktokers que lograron burlar la seguridad ya sabemos cómo ha enfrentado la mansión el paso del tiempo y, aunque hay manchas de humedad, ventanas rotas y marcas claras del abandono en el que está desde hace muchos años, en el recorrido también vimos muebles y acabados que manifiestan su pasado de lujo.