El padre de Britney Spears , Jaime Spears , declaró que no ha hablado con su hija desde hace cuatro meses, cuando se desató una polémica batalla por su tutela, que implica el control que de su carrera profesional, de su patrimonio valuado en 60 millones de dólares y de sus decisiones importantes. "Amo a mi hija y la extraño mucho", dijo a CNN este martes.
“Cuando un miembro de la familia necesita cuidado y protección especial, las familias deben dar un paso al frente, como lo he hecho durante los últimos 12 años o más, para salvaguardar, proteger y seguir amando a Britney incondicionalmente. He brindado y continuaré brindando amor inquebrantable y una protección feroz contra aquellos con intereses egoístas y aquellos que buscan dañarla a ella o a mi familia", añadió.