Enrique Ponce y Paloma Cuevas estarán a punto de obtener el divorcio y podrán llevar más de un año separados (según reportes), pero entre ellos todavía existe un gran cariño.
Por ello y también por la salud emocional de Bianca y Paloma, las dos hijas que tienen en común es que el torero y la empresaria pasarán juntos parte de las fiestas de fin de año, como lo han hecho desde hace más de dos décadas.
El portal Vanitatis del periódico El confidencial reporta que Enrique Ponce y Paloma Cuevas estarán juntos en Madrid para celebrar el 24 y el 25 de diciembre. Después, el matador dejará la capital española para estar junto con su novia, Ana Soria, con quien celebrará el Año Nuevo.
Según el diario, Enrique aún conserva las llaves de la casa en Madrid, y que puede entrar y salir de ahí cuando quiera, siempre y cuando avise con antelación a su ex esposa.
“Paloma nunca ha puesto ningún impedimento y tampoco sus padres. Todo lo contrario, fomenta la presencia en la vida de las niñas, y siempre que lo desee, Enrique tiene la puerta abierta. Lo único que quiere es mantenerlas al margen de todo lo que se dice y se cuenta. Siempre ha sido un buen padre y las niñas lo adoran. Cuando viajaba a México y a Colombia, las llamaba varias veces al día”, aseguró una fuente a Vanitatis.
Según el sitio, a principios de 2021 Enrique Ponce y Paloma Cuevas tienen aún un pendiente: dar por finalizado su divorcio.
La que ya firmó todos los papeles de su separación definitiva es la empresaria. Enrique aún no los firma y aunque se dice que el torero no quiere divorciarse y busca reconquistar a su ex esposa, la realidad es otra: está esperando a que finalice el año fiscal para evitar sorpresas innecesarias en el proceso de su separación.
