Miley Cyrus aseguró de manera tajante que no derramó "demasiadas lágrimas" a raíz de su divorcio de Liam Hemsworth que terminó en enero de este año, lo que no significa que el fin de su historia de amor, así como otras adversidades que ha tenido que afrontar en tiempos recientes, no le hayan dejado profundas secuelas emocionales e incluso "traumas".
En su última entrevista, la estrella del pop reveló que su mejor estrategia a la hora de superar aquellos contratiempos sobre los que no puede ejercer un "control" total consiste en adoptar una actitud lo más constructiva posible y, sobre todo, "mirar hacia delante" para tratar de mejorar su situación en el futuro.