Este 17 de agosto fue muy especial para Federica Quijano integrante de Kabah, pues tuvo un festejo por partida doble: su cumpleaños y el de su hijo Sebastián, quien tiene autismo.
La cantante quiso celebrar con sus fans que su hijo ya tiene once años y para ello hizo una emotiva publicación en Instagram, que consistió en un mensaje y un video en el que no pudo reprimir el llanto.
“Celebro un año más de estar con él, de poderlo amar, de aprender de él, meterme en su mundo, entenderlo de la forma en que él lo ve. Celebro su vida porque es un guerrero, y porque luchó por estar aquí.
“Estuvo 20 días en un hospital luchando por su vida y entonces se merece lo mejor, todo de mí, que no baje la guardia nunca para él. Se merece hoy su fiesta de Monsters y Toy Story y es un niño maravilloso desde el día en que llegó”, dijo en su post.
Federica aseguró que el hecho de que su hijo no pueda expresar su sentimientos no significa que no los tenga.
“Celebro sus risas, su forma de ver la vida, su inteligencia y su forma de abrazarme y cuando te dice: ‘te amo’ y todas estas cosas que a veces crees que no las siente y no las vive. Yo lo siento todos los días”.
La integrante de Kabah , quien también es mamá de una niña llamada María, reconoció en el video que si bien en un principio Sebastián no era lo que esperaba, ahora no concibe la vida sin él.
“Siempre quise tener un niño porque sabía que con él podía jugar futbol, que iba a ser un gran hermano para María… quizá no juega futbol, y quizá no es lo que yo esperé; seguramente es más porque seguramente va a ser un gran hermano para María, y estoy segura que nunca me va a dejar solita. Seguramente él y yo estaremos pegados hasta que yo me muera”.
Finalmente, la cantante agradeció a Tián, como le dice de cariño, por haberla elegido como su mamá. “Te celebro con toda mi alma. Eres mi héroe en todos los aspectos. Te admiro, te amo, chiquitín. Siempre va a estar mamá para cuidarte”.
A Sebastián se le diagnosticó autismo, trastorno de déficit de atención y un retraso mental cuando tenía tres años.
En un principio la institución con la que gestionó su adopción le propuso que “regresara” al niño, pues ella había firmado un documento en el que estipulaba que no aceptaría un niño con alguna discapacidad, pues está sola y no tenía las posibilidades para sacar adelante a un pequeño con esas características.
“Y sin embargo, me tocó…”, contó en 2018 al programa De primera mano donde también reveló que conforme Sebastián ha crecido ha tenido muchos problemas para controlar sus emociones.
