Explica que aunque la investigación realizada por la Ópera de Los Ángeles terminó sin nada real, "esto ha sido ignorado por la prensa".
Admite que ha sido muy doloroso ser excluido del Teatro de la Zarzuela de Madrid y añade: "Mis padres dedicaron su vida a la Zarzuela. Hay un escenario que lleva su nombre en ese teatro y allí en mayo habría cumplido cincuenta años desde mi debut en Madrid. Respeto las instituciones, pero esta decisión se basa en un malentendido".
El tenor español señala que su presunción de inocencia se derrumbó cuando llegó a la prensa el texto de su disculpa, el cual había sido redactado de acuerdo a las precisas solicitudes del Sindicato de Artistas Musicales de EE.UU. (AGMA) para acompañar las conclusiones de la investigación interna hecha pública el 25 de febrero.
Pero fue distribuido por la agencia de noticias Associated Press 12 horas antes. Lamenta que: "la primera consecuencia fue que en unas pocas horas, nuevamente el 26 de febrero, el Ministro de Cultura de mi país tomó la decisión, junto con el presidente del Inaem (Instituto Nacional de Artes Escénicas y Música), de cancelar mi espectáculo.
"Citando fuentes de prensa, sin pedirme aclaraciones y sin haber leído los documentos oficiales de AGMA", abunda. Domingo aseguró que el comunicado "se parecía a un mea culpa, se prestaba mucho a esa interpretación, pero sobre todo fue publicado fuera de contexto.