Por eso está más que agradecida por su familia: "Tengo dos grandes y espectaculares papás que han estado conmigo siempre, ahorita que hice uno de los retos más grandes en mi vida y mi carrera, Mira quién baila, y quedé en el segundo lugar… le agradezco a Dios que me haya dado una pista de baile para poder sanar", aceptó.
Sin más miedos
Hoy, ya centrada, Sofía no tiene miedo de mostrarse en Instagram con sus brackets, que le pusieron hace una semana y tampoco se limita si es que no logra editar bien sus fotos: "Me gusta demostrar lo que realmente soy, mi esencia, soy pésima para poner filtros a las fotos, no soy muy tecnológica, le echo muchas ganas.
"Me gusta compartir con la gente lo que hago y lo que soy, no me gusta transmitir algo que no es Sofía, me pusieron brackets y estaba infartada, asustada, pero ni modo, no tienen nada de malo, hay que quitarles ese tabú de porque los tienes no te ves bien, al contrario, pórtalos con orgullo", expresó Castro.
Y es que dejó muy en claro que no fue por su nuevo aparato odontológico que ya no subía fotos, sino que pasó algo más: "Al principio si me vi y dije: ‘¿Cómo le voy a hacer seis meses?’, pero la verdad es que la pasé mal, me dolía muchísimo la boca, me dio alergia, me hinché, traía aftas, no podía ni hablar".