Que los Middleton son una familia muy unida es un secreto a voces. La madre de la esposa del príncipe William acude a menudo al palacio de Kensington para quedarse con sus tres nietos mientras su hija y su yerno cumplen con sus compromisos oficiales, y las malas lenguas aseguran que Kate se ocupó de usar su posición privilegiada para buscarle un "buen marido" a su hermana Pippa.
El regalo de Kate Middleton, que le cambió la vida a James, su hermano
Todos ellos se desvivieron también en ayudar al menor de la familia, James, cuando le diagnosticaron depresión hace unos años. Según explicó ahora él mismo en una columna escrita para el periódico Daily Mail, sus padres y sus hermanas mayores le sorprendieron en 2011 con un kit para empezar su propia colmena por su cumpleaños.
Desde entonces ha pasado de apicultor aficionado a propietario de más de medio millón de abejas que viven en los terrenos de Bucklebury Manor, la propiedad que sus padres tienen en el condado inglés de Berkshire.
En las últimas semanas ha pasado gran parte de sus días con estos insectos durante el período de confinamiento y no duda en recomendar esta actividad a otras "mentes atribuladas" como la suya
"Para mí, cuidar de mis abejas es como meditar", explicó. "Me ofrece la oportunidad de evadirme y sentirme tan consumido por algo que las horas pasan sin que me dé cuenta. La meditación es una herramienta maravillosa para lidiar con el estrés, la ansiedad y la depresión, y resulta que no solo puede practicarse sentado", recordó.