Podríamos pensar que Stormi, la adorable hija de Kylie Jenner está acostumbrada a tener lo que desea cuando ella lo quiere, tener una mamá multimillonaria podría parecer muy simple, sin embargo, un reciente video posteado en la cuenta de la empresaria demuestra que la pequeña es más paciente de lo que cualquiera podría imaginar y que además, tiene una educación maravillosa, pues obedece a su mamá al recibir una instrucción precisa.
Stormi, la hija de Kylie da una gran lección de paciencia que todos necesitamos
Kylie Jenner puso a prueba la paciencia y control de su pequeña ante un tazón de chocolates, el resultado está dando de qué hablar.
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A través de redes sociales se viralizó un video en el que puede ver a la pequeña Stormi superar una difícil prueba.
Se trata del Fruit Snack Challenge, un reto en el que los padres dejan una golosina frente a los niños y les piden que no la consuman, que tengan paciencia, una tentación difícil de superar por los pequeños.
Voy a poner los chocolates aquí, solo puedes tomar tres, pero tienes que esperar a que mami vuelva del baño ¿ok? Iré un momento al baño y debes esperar a que mami regrese para poder comer.
En el breve clip se puede apreciar a la pequeña emocionarse ante el tazón lleno de lo que parecen ser lunetas de chocolate, sin embargo, atenta escucha la instrucción de Kylie, quien le dice que debe esperar hasta que vuelva para tener sólo tres dulces, para intentar evadir la tentación, Stormi mira atenta la televisión, sin embargo llega a flaquear y se balancea hacia la mesa.
Sin embargo la prueba fue superada exitosamente, demostrando que ser una bebé multimillonaria no la hace ni desobediente ni caprichosa, la pequeña supo esperar.
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En las redes sociales el acto fue calificado de buena forma, pues compararon el comportamiento de la hija de una de las mujeres con más fortuna en el medio, con la de otros pequeños mal educados.
La tierna acción de Stormi enterneció a los seguidores de Kylie, incluso a su famosa hermana Kim, quien dijo que lo que hizo Stormi sería imposible que lo replicaran sus pequeños hijos.
"¡Dios mío! ¡Qué perfecto! Esto no sería el caso con Chi o especialmente Saint”, indicó Kim.
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