En medio del proceso legal por el que atraviesa Pablo Lyle por el altercado vial en el que se involucró en marzo del año pasado, en el que un hombre de 63 años murió, el actor ha tenido que llevar su confinamiento en soledad y lejos de su familia. Esto ha repercutido en el estado anímico del mexicano, según narró su abogado Bruce H. Lehr.
"Mucha gente cree que es muy fácil para Pablo llevar casi un año en arresto domiciliario en Miami. Déjenme decirles que es un lugar adorable cuando vives aquí, pero recuerden que para él es un país ajeno, los Estados Unidos, y ahora con el brote de coronavirus y la cuarentena obligatoria, la gente se podrá dar cuenta de lo difícil que es no poder salir de casa", explicó el abogado, en entrevista para Ventaneando.