A nivel personal, Sherlyn está feliz pues en menos de dos meses tendrá en brazos a su primer hijo. Pero a nivel profesional las cosas no marchan tan bien, pues sus dos cafeterías Isabella podrían estar a punto de cerrar.
La actriz ya ha publicado dos mensajes en Instagram en los que se invita al público a hacer pedidos por teléfono para respetar la cuarentena.