Ahora sí nos atrevemos a decir que 23 años después, Salma Hayek está literalmente igualita que en su primera aparición en los premios Oscar.
Este domingo la veracruzana desfiló por la alfombra roja de los premios de la Academia con un vestido Gucci en color marfil y joyas de la misma casa de modas. Su presencia era importante: presentaría los premios a la Mejor Mezcla y la Mejor Edición de sonido… y, cuando la vimos, creímos haber regresado en el tiempo a aquella primera vez que estuvo en una entrega de premios Oscar.