"Me acuerdo de que estaba durmiendo en la misma cama que mi amiga (la hija del presunto abusador) y empecé a sentir cosquillas por la espalda. Y después todo derivó en cosas que me hicieron sentir extremadamente incómoda. Quería contárselo a mis padres, pero no podía evitar sentirme avergonzada y equivocada, aunque fuera la víctima", señala.
En cuanto a su adicción a las pastillas, Jessica Simpson asegura que en parte se debe a Tommy Mottola.
“En mi cumpleaños 17 viajé a Nueva York para tener varias juntas con distintas disqueras. Canté ‘Amazing Grace’ para Tommy Mottola en Columbia (Records) y él me quiso contratar. Pero luego dijo: ‘Tienes que bajar 15 libras ( )”.
De inmediato “me puse a una dieta extremadamente estricta y empecé a tomar pastillas para adelgazar, que seguí consumiendo por los siguientes 20 años. Cuando finalmente dije: ‘Necesito ayuda’ fue como si yo fuera esa niña pequeña que encontró de nuevo su llamado en la vida. Encontré la dirección y esa fue la de hablar de frente sin miedo”.