Ante la inminente sentencia, Tzipi Refaeli, de 64 años, madre y agente artística de la modelo, ofreció a los jueces ser ella quien cumpla la condena de prisión, permitiendo a Refaeli pagar su deuda con seis meses de trabajos a la comunidad para poder cuidar de sus tres hijos, el último de ellos nacido este lunes.
No obstante, los progenitores de la modelo también tendrán que enfrentarse a su propia condena, acusados de encubrir a la modelo en la supuesta evasión y, en el caso de la madre, de no declarar los impuestos correspondientes a las comisiones que recibió como agente por las distintas contrataciones de su hija en la época señalada, tal y como informa el medio israelí Haaretz.
De esta manera, la familia de la modelo internacional trata de hacer frente al proceso judicial que ella intentó frenar hace unos meses alegando que, en los años en los que se centra la investigación, su residencia fiscal estaba fijada en Estados Unidos, país en el que vivía junto a su entonces pareja, Leonardo DiCaprio.
Sin embargo, el tribunal israelí consideró insuficientes las pruebas aportadas, concluyendo que la mayor parte del año señalado Bar Refaeli vivió en dos propiedades situadas en Tel Aviv, sin que hiciera constar en ningún momento que residía en la casa del actor californiano.