La lista de las bodas de celebridades más googleadas del año ha sido desvelada y curiosamente la cuarta posición de esa clasificación la ocupa una pareja que ya no está unida: Miley Cyrus y Liam Hemsworth.
Las bodas más googleadas de 2019 (unos ya hasta se separaron)
La cantante y el actor australiano se casaron por sorpresa a finales de 2018 en su casa de Tennessee y, aunque ellos mismos compartieron varias imágenes vestidos de novios en sus redes sociales, el interés por conocer todos los detalles acerca de su gran día no disminuyó lo más mínimo, hasta el punto de convertir su ceremonia en una de las más buscadas en esa plataforma. El posterior anuncio de su separación, que se produjo el pasado mes de agosto, también generó una gran repercusión debido a lo breve de su matrimonio.
Otro de los detalles que llama poderosamente la atención de ese ranking es que el primer y segundo puesto lo ocupan dos bodas sobre las que no han trascendido detalles: las de Miranda Lambert y Jennifer Lawrence respectivamente.
La estrella del country anunció a través de Instagram que le había dado el 'sí quiero' a un atractivo agente de policía llamado Brendan Mcloughlin con quien ni siquiera se sabía que estaba saliendo y la oscarizada actriz, por su parte, organizó una ceremonia blindada en Rhode Island de la que solo trascendieron un par de imágenes tomadas desde una distancia considerable.
Jennifer Lawrence se casó en octubre con el galerista Cooke Maroney en una fiesta privada. La ceremonia se realizó en la Mansión Newport, en Rhode Island, y de acuerdo con People, asistieron 150 personas, entre las que destacaron personalidades como Adele, Emma Stone, Sienna Miller y Kris Jenner.
El Castillo en Newport es un imponente edificio del siglo XIX famoso por albergar fantasmas, de hecho, los fines de semana se realizan en el lugar visitas paranormales guiadas.
La única celebridad latina que se ha colado en la clasificación ha sido la cantante Chiquis Rivera, que se casó el pasado junio con Lorenzo E. Méndez Ronquillo en una boda que estuvo rodeada de cierta polémica debido a los extremos a los que llegaron los novios por proteger la entrada de la artista a la iglesia o el interior del recinto donde tuvo lugar la fiesta posterior.