Pasaron 18 años desde la última vez que Christina Aguilera visitó México. La cantante cumplió su promesa de regresar al país y así quedó demostrado la noche de ayer cuando la neoyorquina reventó con su voz el Palacio de los Deportes, que vibró con cada tema y cada nota que interpretó como parte del The X Tour.
Respaldada por ocho bailarines que la acompañaron casi en todo momento, la cantante conectó a la perfección con su público al recordar éxitos como Bionic, Your body y Genie In the bottle.
Seis cambios de vestuario, ocho bailarines y cuatro músicos la acompañaron en el concierto, en el que lució una pantalla gigante con incontables videos en producción, y con los cuales se dio tiempo de cambiarse y hacer la transición a distintas etapas del espectáculo.
“Dios mío, se siente muy bien estar aquí, hace mucho tiempo que no nos veíamos. Después de andar por todo el mundo, ahora estoy aquí con el X tour tras 20 años de pelear, de ser fuertes y estoy muy inspirada por sus historias y todo lo que hemos vivido y sufrido.
"Pasó mucho tiempo para volvernos a ver, pero no quiero pasar por alto que ustedes siempre me han acompañado y que jamás han dejado de quererme Ustedes son fantásticos, Ciudad de México", declaró la cantante en pleno show.
Temas como Dirrrty y Lady Marmalade, este último conocido por formar parte de la banda sonora de la cinta Moulin Rouge, permitieron que sus fanáticos se adentraran en un sensual mood que la cantante proyectó, haciéndolos sacar a flote sus más sensuales bailes.
Luego de otro cambio de vestuario y haciendo un recordatorio de que sus orígenes fueron el soul, el blues y el gospell, la cantante hizo un bloque en el que María, Hallelujah, Makes Me Wanna Pray y Like a Prayer, de Madonna, fueron interpretados.
A diferencia de las presentaciones de este tour en otras partes del mundo como Berlín, Londres, Moscú o París, para la fase de México, la anfitriona quiso complacer a sus seguidores al interpretar sus éxitos en español como Contigo en la distancia y Falsas esperanzas, donde la pirotecnia, el cuerpo de baile y el sofisticado juego de luces no fueron necesarios, ya que su voz bastó para llenar el escenario.
Tras una breve pausa, la cantante ganadora de varios premios Grammy retomó el escenario para hacer vibrar al público con Beautiful, Fighter y Let There Be Love, con lo que cerró su presentación.
