Cuando los One Direction anunciaron en 2015 que se tomarían un 'descanso temporal', muy pocos pensaron que algún día regresarían realmente a la escena musical por distintos motivos: en primer lugar, porque era evidente que todos estaban interesados en iniciar sus carreras en solitario y además, según fueron confesando en los años posteriores, su experiencia dentro de la banda más famosa del planeta no había sido precisamente un camino de rosas.
Dura confesión: One Direction habría acabado matando a Liam Payne
En el caso concreto de Liam Payne, él está convencido de que seguir adelante con el grupo, que lo convirtió en una persona introvertida y totalmente aislada del mundo, habría acabado por costarle la vida.
"Nos hacían trabajar demasiado, sin duda. Yo no tenía vida personal, no tuve la oportunidad de aprender nada acerca de mí mismo. Recuerdo que cuando empecé a acudir a terapia, me preguntaron qué me gustaba hacer. Y no pude responder: no tenía ni idea", ha recordado en una entrevista al podcast 'Table Manners'.
"Pasé demasiado tiempo viviendo como la típica estrella del pop reclusa, me asustaba la gente y me pasaba todo el tiempo encerrado. Tenía que parar, es evidente. Me habría matado".
Su relación sentimental con la cantante Cheryl, madre de su único hijo, también se vio perjudicada por su fama que, sumada a la inmensa popularidad de su ex en su país natal, hacía imposible que pasaran desapercibidos por la calle.
Pasé demasiado tiempo viviendo como la típica estrella del pop reclusa, me asustaba la gente y me pasaba todo el tiempo encerrado. Tenía que parar, es evidente. Me habría matado.
"Creo que eso es algo que nos 'contagiamos' mutuamente. En el peor sentido posible. Era mucha presión para una relación. En su caso, tardaba una eternidad en salir de casa, no importa adónde fuéramos, porque le preocupaba mucho [quién pudiera vernos]"", ha reconocido.