¿Lograste hablar con José Joel y Marisol finalmente?
Fue una calumnia enorme decir que no los queríamos entrevistar también a ellos. Es un disparate que un periodista no tome una entrevista de la que todo mundo quiere escuchar. Mis productores estuvieron como locos buscándolos, como todos los medios, pero no pudimos. Cuando ocurre lo de ventaneando, al día siguiente, ellos ya estaban disponibles. Lo que pasó es que al parecer alguien de su equipo cometió un error y no nos comunicó antes.
Por algún momento se te percibió en México como la cómplice de la villana del momento...
Yo estaba horrorizada, pensaba en qué momento todo se había tergiversado tanto. Yo hice una entrevista exclusiva en la que averiguo que su cuerpo finalmente irá a México para ser despedido pero me atacan porque supuestamente hice solo preguntas suaves porque estaba parcializada con una parte del caso.
¿En qué crees que va a parar todo esto?
Cuando hablé con Pepe y Marisol estaban ya por reunirse con Sarita. Yo creo que esto es una tregua, como dijo José Joel, porque es una reconciliación para tener un funeral en suelo azteca, como debe de ser, como una familia unida, al menos por ahora. Ojalá que me equivoque, pero creo que esto va a durar poco porque efectivamente es una tregua y entendemos esto como una cese al fuego, pero que en el fondo hay desconfianza de ambas partes y eso trae problemas a largo plazo. Si mantienen la comunicación, hay esperanza.
¿Vendrás a México a los funerales?
Estamos viendo bien cuándo y cómo van a ser. Yo creo que sí. Mis mejores amigos son mexicanos y conozco a los su país, sé que son apasionados y que son los más divertidos con los memes. Lo entiendo y es pos eso que me defendí de esta campaña que se armó en mi contra, pero cuando sabes que sigues un código de ética, todo está perfecto.