Hace un par de semanas Adele se dejó ver en la divertida fiesta por el 37 cumpleaños del rapero Skepta celebrada en Londres y, al tratarse de una de sus primeras apariciones públicas tras conocerse que en agosto había solicitado finalmente el divorcio del que fuera su pareja durante los últimos siete años, Simon Konecki, la principal incógnita era si acudiría sola o acompañada.
Según la información que publica ahora el periódico The Sun, la intérprete no llevó ninguna cita porque la persona con quien habría rehecho su vida sentimental era precisamente el protagonista de la velada.