El último episodio del programa que Jada Pinkett Smith graba para Facebook, Red Table Talk, ha desvelado que su hijo mayor Jaden se vio obligado a renunciar hace un año a su estilo de vida vegano presionado en gran parte por sus famosos padres.
Pese a su deseo de comprometerse con un estilo de vida más sostenible y renunciar por completo al consumo de productos derivados de los animales, el músico y actor tuvo que admitir que algo "no iba bien" cuando comenzó a perder peso a un ritmo alarmante y a lucir unas ojeras constantes.