Britney Spears está a punto de vivir un trago muy amargo en su vida, justo cuando parecía estar saliendo de una fuerte depresión que la aquejó pues podría estar a un paso de perder la custodia de sus hijos.
Kevin Federline, exmarido de Britney Spears, presentó una denuncia contra el abuelo materno de los dos hijos que tiene con la cantante el pasado 25 de agosto acusándole de agredir físicamente a su primogénito Sean Preston, de 13 años, durante un altercado que habría tenido lugar el día anterior.