"Lleva algo a Capitol Hill o habla realmente sobre algo y recién ahí estaré impresionada", señaló Demi a través de sus redes sociales.
Ante el revuelo que causó su declaración, Lovato explicó poco después: "Todo lo que quiero es ver a las mujeres unidas y haciendo la diferencia. Un cambio real en la sociedad. Todo mundo tiene su forma de apoyar a los otros y, al final del día, ayudar a las víctimas es lo único que importa".
Pero eso no fue todo, pues en ese mismo año, Lovato señaló a Swift y a sus amigas de preservar estereotipos físicos y vender una imagen poco real del cuerpo femenino.
"Esto probablemente me meterá en problemas, pero no veo a nadie en ese 'squad' con un cuerpo normal. Es una especie de falsa imagen hacia la gente. O de cómo debería ser la gente, y eso no es real", declaró en una entrevista en la que también dijo que "tener una canción y un video (Bad Blood) en el que atacas a Katy Perry no es 'empoderamiento femenino'".
La más reciente de sus polémicas ocurrió cuando Taylor Swift denunció a Scooter Braun de aparentemente haberle quitado los derechos de todas sus canciones. Pues Demi Lovato se metió a la polémica y defendió al manager. "He tratado con gente mala en la industria y Scooter no es uno de ellos. Es un buen hombre. Personalmente, estoy agradecida de que haya entrado en mi vida cuando lo hizo. Por favor, deja de 'arrastrar' a las personas o acosándolas. Hay suficiente odio en este mundo tal como es".