Una vez instalados en Madrid, Jimena “La Choco” Pérez y su familia decidieron tomarse unas merecidas vacaciones, y después de pasar unos cuantos días en Barcelona, su segunda parada fue Cap d'Agde, en el sur de Francia, donde llegaron a un hotel inspirado en el mundo de los piratas, cosa que han disfrutado en especial sus hijos Iker e Iñaki.
El problema es que nunca faltan los haters, quienes acusaron a la conductora de mostrarse (al menos en redes) muy poco preocupada por el trastorno del lenguaje que aqueja a su hijo menor y que es el motivo por el que la familia se mudó a Europa. Entonces, a la anfitriona de La voz… México no le quedó de otra más que salir a fijar su postura al respecto.