Cada vez falta menos para que Orlando Bloom y Katy Perry se den el ‘sí, acepto’ en su próxima boda programada para el Día de San Valentín.
Y en plena controversia por el supuesto embarazo de la cantante surge una declaración que pone sobre la mesa un panorama favorable para el futuro matrimonio, pues después de un divorcio, el actor asegura que no quiere volver a divorciarse.