Así consintieron a Gus Van Sant en el Festival de Cine de Guanajuato
Durante su paso por la edición 22 del Guanajuato International Film Festival (GIFF), el realizador Gus Van Sant se dijo profundamente conmovido por la arquitectura de la Ciudad Patrimonio de la Humanidad, pero más aún porque aquí murió uno de sus ídolos culturales, Neal Cassady, icono de la Generación Beat.
Sarah Hoch, directora ejecutiva del GIFF, quiso que la experiencia que el director de Good Will Hunting viviera en la actual Capital Americana de Cultura fuera única, por lo que el viernes que llegó lo utilizó para recorrer a su propio paso el Centro Histórico y disfrutar de las calles y restaurantes de la zona, sin ser molestado.
Ya como parte de su agenda, Van Sant visitó el sábado el viñedo Tres Raíces, en el Ejido de Tequisquiapan, en dónde disfrutó de la oferta culinaria del restaurante Terruño y realizó el tour guiado por las capillas/fortalezas del lugar, que lo dejaron gratamente impresionado. “Mi día fue genial, conocí iglesias muy antiguas y paisajes”, compartió.
Por la noche, el ganador de la Palma de Oro por Elephant recibió la Cruz de Plata, máximo galardón del GIFF, y para celebrarlo, Hoch realizó una cena con invitados especiales al certamen cinematográfico, a la que Quién tuvo acceso en exclusiva y pudo atestiguar lo mucho que el estadounidense disfruta de la cocina y la compañía nacional.
Hasta el restaurante Moxi, del hotel Matilda, llegó Michel Franco, también favorito del Festival de Cannes, quien compartió su gusto por departir con Gus: “Es un gran director, me encantan sus películas, es original y a la vez logra tener un gran público, es un buen balance, no sé si es un referente (en su cine), pero es un director al que admiro mucho”.
Entre la lista de invitados estuvieron también el realizador filipino Kidlat Tahimik, Hugo Villa, director general de Actividades Cinematográficas (Filmoteca de la Universidad Nacional Autónoma de México); Daniel Kandell, director de Relaciones Internacionales del GIFF; el subsecretario de Desarrollo Cultural, Edgar San Juan, Rafael Micha de Grupo Habita y la actriz Arcelia Ramírez, quiénes disfrutaron de un menú de seis tiempos.
La animada plática de los asistentes versó entre la condición actual del cine mundial cuando llegaron las entradas: ceviche de pesca del día, tomates, jengibre, cebolla encurtida y tamal de cuitlacoche, salsa tatemada, queso, crema de rancho, acelga. Luego siguieron los platos fuertes, pesca del día, pepian verde, mix de hojas verdes y Mole rojo con tocineta, pollito de leche, arroz salvaje.
Tras comentar la visión artística de cada uno o cómo Netflix cambió las reglas del juego, los comensales disfrutaron de dos postres: pay de limón; cremoso de limón, crumble de mantequilla negra y brownie de chocolate; brownie con helado de chocolate y frutos rojos. Van Sant platicó la mayor parte del tiempo con Hoch, para luego estar con Tahimik y Franco.
Antes de terminar la velada, Hoch le entregó a su invitado de honor internacional un presente de parte de Bob Pittman y Bertha González, dueños de la marca de tequila Casa Dragones. Una botella personalizada que Van Sant recibió con todo gusto al escuchar que es una de las productoras más importantes de la bebida nacional.