Kim Kardashian aumenta su fortuna tras ganar demanda millonaria a marca de ropa
Kim Kardashian ha ganado una batalla en la guerra abierta que le ha declarado a las conocidas como firmas de moda rápida, que se caracterizan por sus precios asequibles y por la frecuencia con que renuevan sus colecciones.
La esposa de Kanye West acaba de ganar la demanda que interpuso contra la firma Missguided el pasado mes de febrero, que tendrá que pagarle 2,8 millones de dólares en concepto de daños y perjuicios. Además, a partir de ahora la compañía tampoco podrá usar su nombre o su marca en beneficio propio, como sí ha realizado con mucha frecuencia en el pasado al etiquetarla en las publicaciones de Instagram con las que promocionaba sus diseños basados en el vestuario de la empresaria, que en la mayoría de los casos cruzaban la línea de la inspiración para convertirse en un plagio.
Kim ya se ha quejado públicamente en varias ocasiones del daño que causan esas tácticas de negocio a su reputación y a su relación con los diseñadores por la rapidez milagrosa con que las copias de sus atuendos se ponen a la venta en ese tipo de páginas webs después de que ella los luzca en público, y que ha provocado que las malas lenguas la acusen de informar ella misma a esas marcas de la ropa que piensa ponerse.
"He visto cómo esas empresas se aprovechaban del esfuerzo de mi marido durante años y ahora también está afectando a los diseñadores que tan generosamente me han dado acceso a su maravilloso trabajo, y no puedo seguir quedándome callada ante ello", explicaba Kim en su cuenta de Twitter después de que el revelador vestido de Thierry Mugler que se puso para una entrega de premios en Los Ángeles acabara en el portal de Fashion Nova en cuestión de 48 horas.