La respuesta de #MeTooMúsicosMexicanos tras suicidio de Armando Vega Gil

Pese a que la cuenta de Twitter @MeTooMúsicosMexicanos -donde se hicieron denuncias por acoso sexual en la escena musical mexicana- desapareció después de la muerte de Armando Vega Gil, bajista y fundador del grupo Botellita de Jerez, sus administradores publicaron antes un breve mensaje en el que afirman que su suicidio s etrató de un acto para distorsionar al movimiento.

“Fue un acto para difamar al movimiento. Hablamos personalmente con Armando ayer para hacer la averiguación pertinente al caso.Él no tuvo respuesta final hasta las 6 AM. Publicó su supuesta “carta de suicidio”a las 4 AM. Él sabía que era culpable. Fue chantaje mediático”, aseguraron ante la pregunta de una seguidora quien quería saber si, en efecto, Armando tenía intenciones de quitarse la vida.

La muerte de uno de los fundadores de Botellita de Jerez ha generado ya reacciones, entre ellas las del actor Gael García Bernal, el director Manolo Caro y la cantante Amandititita.

“Con el corazón en la mano y roto. Estoy muy consternada y dolida. Esto me parece lo más espantoso. Y perdóname si yo también en algunos casos les creo a ellos”, escribió en un primer momento Amandititita.

Luego agregó: “Cierran la cuenta de #MeTooMusicosMexicanos y ¿El compromiso con las víctimas? y ¿su supuesta red de ayuda? Esta cuenta
era muy violenta. Y solo desacreditó la causa, la demeritó. Estoy enojada, furiosa, tristísima”, dijo.

En tanto, el director de La casa de las flores, Manolo Caro, escribió: “El movimiento en redes esta hecho con una irresponsabilidad absoluta, triste. Ojalá las víctimas encuentren justicia en ambos lados”.

Asimismo, Gael García Bernal lamentó el fallecimiento de Armando Vega Gil. “No, carajo. No puede ser. Qué tristeza... qué pinche tristeza”.

Sobre la denuncia, que hasta la fecha sigue siendo anónima y que ya desapareció de redes; sin embargo, recuperamos algunas de las cosas que se dijo en la denuncia: “Él quería enseñarme a besar –como si yo fuera un objeto nuevo a estrenar. Me decía cosas cada vez más asquerosas y explícitamente sexuales hasta que me dio muchísimo miedo; decidí bloquearlo y cambié de número celular…”.