La admirable decisión que Anna Faris y Chris Pratt han tomado tras su divorcio
Hasta ahora el divorcio de Chris Pratt y Anna Faris se ha desarrollado -tal y como ellos adelantaron en el momento en que hicieron pública su separación- de la forma más cordial posible y con ambas partes esforzándose para que el procedimiento sea lo menos desagradable posible. Sin embargo, en lo que respecta a su único hijo en común, la expareja ha preferido no dejar nada al azar y estipular de forma meticulosa y sobre el papel los términos que regirán cómo educan y crían juntos al pequeño, cuyo custodia física y legal comparten.
Según desvelan los documentos que finalizaron legalmente su matrimonio la semana pasada, los intérpretes han accedido a vivir a menos de ocho kilómetros el uno del otro durante los próximos cinco años para asegurar que ambos puedan ver con regularidad a su hijo. Si alguno de ellos tuviera que mudarse en ese período de tiempo, deberá informar al otro por escrito con al menos tres meses de antelación. La misma norma se aplica también a los viajes al extranjero con el niño, aunque en ese caso resultará suficiente con que den un aviso un mes antes y en el caso de los desplazamientos fuera del estado de California -donde han acordado seguir residiendo- resultará suficientemente con que lo hagan dentro de un margen "razonable".
Este mismo mes las dos celebridades dieron un paso más para rehacer sus vidas por separado poniendo a la venta la mansión de Los Ángeles que hasta el año pasado había sido su hogar familiar por casi cinco millones de dólares.
Chris, por su parte, parece haber iniciado una nueva relación sentimental con Katherine Schwarzenegger , la hija del antiguo gobernador de California Arnold Schwarzenegger y Maria Shriver, mientras que Anna ha sido vista en varias ocasiones con el cineasta Michael Barrett, con quien trabajó en su última película 'Hombre al agua'.