El motivo por el que Ben Affleck no ha podido superar el alcoholismo

Ben Affleck lleva más de 20 años luchando contra el alcoholismo, adicción que no ha podido dejar pese a sus varios intentos.

Sus amigos explican que cuando no tiene trabajo, el actor sufre de ataques de ansiedad que lo ponen en un estado de “autodestrucción”. Aunado a eso, el intérprete de Batman ha estado muy deprimido desde que terminó hace poco con la productora de Saturday Night Live, Lindsay Shookus.

“Los problemas de Ben con el abuso de sustancias parecen llegar a una fase destructiva cuando no está activo. Su adicción no parece tan poderosa cuando está trabajando”, contó una fuente al sitio Page Six.

“Ben tiene un problema de abuso de sustancias con alcohol, que ha dejado y retomado durante mucho tiempo. Ha estado luchando contra estos demonios por años. Actualmente está en rehabilitación y es probable que entre y salga del tratamiento más veces en el futuro. Pero la buena noticia es que esto no afecta su trabajo. Ganó un Oscar, es muy querido en Hollywood y sigue trabajando, la gente quiere trabajar con él”.

Otro amigo dijo a la página que la ventaja es que Ben nunca ha tenido miedo de pedir ayuda y que está dispuesto a mejorar. “Va a las reuniones (de AA) todos los días, nunca sale de una rehabilitación. Está sufriendo y afortunadamente no tiene miedo de pedir ayuda. La rehabilitación es algo bueno”, aseguró el amigo del actor.

Él mismo reconoció su problema en Facebook: “La adicción al alcohol es algo con lo que he lidiado en el pasado y que continuaré confrontando. Quiero vivir al máximo y ser el mejor padre que puedo ser. Quiero que mis hijos sepan que no deben de sentir vergüenza por pedir ayuda cuando la necesitas”.

La semana pasada, el actor fue ingresado de nueva cuenta en una clínica de Los Ángeles para tratar este tipo de problemas, aunque no esta primera vez. ¿Por qué después de más de dos décadas luchando con esta adicción aún no ha podido salir victorioso?

Su infancia
Al parecer, haber tenido una infancia difícil lo afectó más de lo que se puede pensar. Por una parte, su padre fue alcohólico durante años, y el fantasma de esas escenas de su niñez, viendo a su padre estar completamente alcoholizado, lo persiguen hasta ahora. Además, también le afectó el divorcio de sus padres. Pero gracias a su hermano Casey y a su mejor amigo, Matt Damon, encontró el apoyo suficiente para sobrellevar su situación.Sin embargo, Ben ya había empezado a beber.

Su primer éxito
Ben saltó a la fama a los 24 años con la película Good Will Hunting. Para entonces ya tenía un problema con el alcohol que decidió frenar y por unos años se mantuvo sobrio.

La primera vez en rehab
Fue en 2001, cuando había terminado su romance con Gwyneth Paltrow y estaba por empezar una relación con Jennifer Lopez que Ben ingresó por primera vez a rehabilitación. En esa ocasión tomó un programa de 30 días para dejar esa adicción. Tenía 29 años y se le veía constantemente en fiestas.

La vida familiar
Se casó con Jennifer Garner en 2004 y la vida en familia y su paternidad le cambiaron la forma de ver su existencia. De hecho durante casi 10 años estuvo alejado de todos los excesos.

De vuelta a la soltería
Pero una vez que se separó de Garner, luego de 10 años de matrimonio, fue visto con una “guía de sobriedad” que lo trató de mantener en el buen camino.

Luego de su rompimiento con Lindsay Shookus, volvió a recaer.

Cabe mencionar que estén juntos o no, su ex esposa lo ha apoyado siempre; incluso en esta última recaída ella fue quien lo llevó a rehabilitación. Habrá que ver lo que sucederá una vez que queden finalmente divorciados, lo que ocurrirá una vez que termine su tratamiento en la clínica donde se encuentra.