Este es el nuevo proyecto de David Beckham que lo alejará de su familia

Estaba a o punto del retiro, pero el futbol tan caprichoso tenía otros planes para David Beckham.

A finales de año, el astro abandonará su hogar londinense para instalarse en Miami, donde cumplirá su sueño de ser el propietario de su propio equipo de fútbol.

El británico lleva casi cuatro años lidiando con los trámites administrativos y burocráticos para establecer en la ciudad del estado de Florida una franquicia de la MLS, la principal liga de Estados Unidos y Canadá, y este lunes por fin ha podido presentar oficialmente su equipo.

Esto le valió el reconocimiento y palabras de apoyo de mucho, muchos amigos, que, por supuesto son estrellas.
Marc Anthony; Tom Brady, quarterback de los Patriotas de Nueva Inglaterra; Jennifer Lopez; Will Smith, Neymar Jr., y sus hijos, hicieron un video para felicitar al futbolista, quien a su vez lo subió a su cuenta de Facebook.

De momento no se ha dado a conocer cuál será el nombre de su nuevo equipo, cuándo se estrenará sobre el terreno de juego o cuáles serán sus colores, pero sí se ha anunciado el inicio de la construcción de su estadio con capacidad para 25 mil personas, en el terreno con el que Beckham se hizo en 2017 por un precio de nueve millones de dólares en el barrio de Overtown y que le generó más de un quebradero de cabeza debido a la oposición de parte de los vecinos de la zona y ciertos problemas legales.

Sin embargo, este último proyecto del antiguo capitán de la selección inglesa le obligará a pasar tiempo lejos de su esposa, la diseñadora Victoria Beckham, y sus tres hijos menores -Romeo, Cruz y Harper-, que continuarán residiendo en su Inglaterra natal.

"Quiero darle las gracias a mi familia, a Brooklyn y a Victoria, que está en casa con el resto de los niños. Ellos me han apoyado en las buenas y en las malas, y les debo todo", dijo David en conferencia de prensa.

En ese mismo acto también se emitió un breve vídeo en el que la ex Spice Girl aseguraba que tanto ella como sus niños tenían muchas ganas de visitar con más frecuencia Miami, mientras Harper le aseguraba a su padre: "Hola papá, me muero de ganas de ver tu primer partido".